Algo que me rompe bastante los ovarios es la moda marketinera posmoderna de sustituir la primera persona del singular (YO) por la primera persona del plural (NOSOTROS). Ejemplos de la vida cotidiana.

CASO 1: La ferretería de Cacho, donde abre Cacho, cierra Cacho, compra, vende y chupa los clavos nada más que Cacho, tiene carteles que dicen "Les ofrecemos bla, bla, bla", "Estamos trabajando para bla, bla, bla", "Hoy no abrimos por bla, bla, bla".

CASO 2: Folletería y páginas web que ofrecen servicios y productos donde en sus párrafos de presentación podemos encontrar frases como: "Nuestra empresa se encarga...","Somos profesionales que brindamos...","Estamos para servirle...". En muchos casos sabemos que detrás de esta "empresa" ¡hay una sola persona!. Pareciera que si los futuros clientes creen que hay más de una persona trabajando el resultado será mejor.

CASO 3 (la causa de este post): Hoy voy a una nueva peluquería, entro y me preguntan -¿Con cuál de nuestras peluqueras se quiere atender?- Como no las conocía me indican -Pasa con Ana, es la única que está-. Primera autopregunta ¿Para qué mierda me preguntás con quién me quiero atender si hay una sola persona en el lugar? Primera autorespuesta: necesidad marketinera de demostrar que hay mucha gente trabajando ahí.
Mientras Ana me lava el pelo, me dice -Podemos hacerte un tratamiento nutritivo- y pienso, ahí va otra vez el plural. Luego, cuando me desenreda el pelo, me aclara -Si te tiramos mucho el cabello, avisanos- con cara de poca paciencia miré hacia el espejo que tenía enfrente y veo el reflejo de Ana SOLA con el peine en la mano. Segunda autopregunta ¿Esta mujer tiene trastornos de personalidad múltiple, esquizofrenia o el marketing posmoderno se fue al carajo?

1 minas comunes concluyen:

Antares dijo...

yo creo que de tanto repetir el nosotros, empiezan a ver su imagen multiplicada por todos lados. Y si, dan un poco de miedito, como ir a depilarse con Norman Bates...

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